Mi Canción

miércoles, diciembre 29, 2010

Otra ve se me jodió el calembo!! [2 de 2]

  Primera parte


Yo que andaba con mi mochilita y mi uniforme, listo para regresar al trabajo ese día, como que medio me quedo en el aire, tratando de asimilar lo que me había dicho el doctor. Le digo que me dé hasta la tarde, para poner todas mis cosas en orden; así que llamo a los familiares y al trabajo. Todo salió bien en el trabajo y mi matre andaba por santiago ese día, así que nos juntamos a planear todo.

Yo pensaba venir a SAJOMA a buscar ropa, quitarme el uniforme y bajar listo para todo en la tarde, pero acordamos mejor, comprar la ropa interior, los féferes de aseo, unas chancletas de goma y revistas pal embuyo.

Llego a la clínica a eso de la 1:00 de la tarde, para enterarme quel doctor llegaría de 2 a 3, majomenos, así que nos vamos para un área de la clínica con aire acondicionado a esperar y esperar y esperar…

Llega el Dr. Me llena la hoja para el ingreso y me envía al área de emergencias, donde están ubicadas las oficinas de internamiento… como una hora más esperando y entonces me dicen que no hay habitaciones y me van a poner en una camilla en emergencias, mientras aparece una cama; ya sabía yo, que las cosas no serían como esperaba.

Voy al baño común y me quito mi uniforme, para salir con unos pantaloncitos cortitos y una franela que fue lo que apareció a bajo precio en La Sirena… ya se imagina ese espectáculo... 83 personas en la emergencia y yo paso por el medio, con unos hot pants, una franelita ajustada y medias y zapatos de vestir.

Me acuesto en mi camilla y al rato, llegan a ponerme la línea… ya estoy acostado, cuando escucho una voz familiar a mi lado, sucede que el abuelo de una querida compañera de trabajo, estaba justo al lado mío y a mi amiga no se le ocurrió otra magnífica idea, que tirarme par de fotos y subirlas a feibu.

El otro problema era, que en esos tiempos era que el dengue estaba en su apogeo y un reguero de virus respiratorios, tenían la emergencia fletá de cabo a rabo… Así que para evitar la propagación, pues mantenían el aire acondicionado en nivel de unificabolitas [temperatura en la que el cuerpo del hombre se modifica y lo do granito se vuelven uno].

Mi primer encuentro con el dengue, fue el 2do paciente que tenía a mi izquierda; un pobre señor no sé de cuántos años, pero debía pasar de los 80; en turno de transfusiones… la familia salió un momento a hacer llamadas y buscar donantes cuando ahí mismo, sólo escuché el chorro de sangre digerida, golpeando contra el suelo, salpicando la cortina, mis zapatos y ese característico olor que se me quedó en la nariz hasta el día de hoy.

Ahí estaba yo, escasamente vestido, con una sábana semi transparente por el uso, con un suero pegado en medio de todas las enfermedades habidas y por haber, con un reguero de sangre a un lado y sin esperanzas de mejoría… por 3 días.

Pero mi suerte cambió un poco más tarde, cuando me dijeron que me trasladarían a otra área más tranquila; y ahí voy otra vez, con todos mis féferes, por suerte llegó una amiga a darme una mano y me ayudó con los bultos… me pasaron a otra área, más tranquila, con una cama en vez de camilla… Pero… [Siempre el jodío “pero”]… era en la misma emergencia, solo que atrás, 5 camas separadas por cortinas y el aire más fuerte que en la otra parte… A un lado una señora con asma y a al otro, una joven con dengue.

Gratzias a la ayuda de mi amiga, que me llevó una friza, no me morí de Hipotermia esa noche, pues atento a evitar la proliferación de bacterias [….receso para que el cerebro se reponga….] entonces no subían el aire [por qué la gente dice “Bajen ese aire, que ta muy frío” si mientras más baja la temperatura, pos ma frío da… no?]…

Y así, la primera noche, pasó medio incómoda, chequeos y cambios de medicamento, carajitos dando grito, gente vomitando y todas las maravillas que se viven en una sala de emergencia… Me levanto a las 6 de la mañana, para coger el baño que to las viejas y enfermos de vainas raras que habían en la sala.

Pasé las de Abel embromando con quitarme y ponerme la camiseta con el suero enganchao, pero lo conseguí, durante los baños que tuve que darme ahí, siempre me tocaban la puerta antes de terminar, pero sobreviví la experiencia sin mayores inconvenientes.
El día pasó más o menos igual que la noche, la misma comida desabría y sin variedad, me comí unos chocolates de contrabando y un pie de manzana que me llevaron… el doctor fue a visitarme y a cuestionar que por qué aún no estaba en una habitación, el pobre como que no tiene mucho voto en la clínica, porque no consoguió nada.

Otra noche por las mismas y otro día igual… con la salvedad de que me cambiaron la dieta… ya no era gelatina y arroz desabrío con fruta desabría, ahora era ensalada desabría con arroz desabrío con pollo desabrío y gelatina.

Llega otra noche y ya no tengo mucho ánimo de sanarme… Pero una luz en el camino!!! Apareció una habitación… me llevan y me acuestan, me cambian el suero, el medicamento, comiendo cómodamente, Televisión, aire pa mi solito, baño pa mi solito… Creo que arranqué a sanarme más rápido… me levanto al otro día como a las 8, me rasuro, me baño con calma y sin prisa, me recuesto a descansar en mi cama automática.
Viene un enfermero, que el doctor me quiere ver… me llevan hasta allá y entro… Todo de maravilla, la habitación, las comodidades, las atenciones… y mi salud…. Ya estoy bien y me puedo ir… Me dieron ganas de darme un trompón en un testículo, a ver si me dejaban descansar un día por lo menos comiendo y durmiendo bien.

En fin… de regreso pa mi casa, ya sin problemas de orina, con un morao en un brazo, que parecía la mordida de un burro, 2 trasnoches encima y por lo menos el seguro cubrió casi la totalidad de los gastos… Espero quel calembo no me joda por par de meses más, pues sé que es imposible que sea para siempre; es la única parte de mi cuerpo que se gobierna [o a todos los hombres nos pasa lo mismo?].

Akí par de fotos del Dr. y sus instrumentos...






 ...Coyote...